Día mundial de la relajación

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Cada 15 de agosto se celebra el Día Mundial de la Relajación, una fecha importante para analizar nuestros ritmos y hábitos de vida e intentar modificar aquellas actitudes y acciones que perjudican nuestra salud mental.



La vorágine en la que vivimos, el estrés laboral y las preocupaciones personales no hacen más que cargarnos de tensiones que nos pueden ocasionar desde pequeños malestares, hasta graves problemas de salud. Por eso, y con el objetivo de tomar conciencia sobre esta problemática tan recurrente en el mundo actual, es que cada 15 de agosto se celebra el Día Mundial de la Relajación.

Si bien la elección de la fecha no se asocia a un hecho concreto, desde hace más de 10 años se festeja este día alrededor del mundo, utilizándolo como oportunidad para dar a conocer la importancia que tiene la relajación en nuestra vida cotidiana.

Hay distintas técnicas que se pueden realizar en casa y que ayudan a relajarse y a combatir la tensión en el día a día, como la práctica del mindfulness, escuchar música o salir a pasear. 

Los ejercicios de respiración siempre son importantes para relajarnos. Respirar y ser conscientes de eso puede bajar la presión arterial, la frecuencia cardíaca, el ritmo respiratorio y generar calma. 

Una de las técnicas más empleadas es la respiración abdominal. Adoptando una postura relajada, con una mano en el abdomen y otra sobre el pecho, se inspira aire. Hay que tomar aire por la nariz y expulsarlo por la boca, pero con una condición: la mano que se levanta debe ser la que está en contacto con el abdomen. Así se consigue una respiración completa con toda la capacidad pulmonar. Hay que realizar de seis a diez respiraciones lentas por minuto. 

Dedica algunos minutos al día a pasear al aire libre. Aprovecha ese momento para despejar tu mente de problemas y gestionar tu estrés. Camina, observa lo que sucede a tu alrededor, disfruta del paisaje y cambia de aire. 

Dedícate tiempo. Uno de los principales puntos a tener en cuenta para tranquilizarse y desconectar, es disfrutar de tiempo para nosotros mismos: tiempo de ocio, de paz, de desconexión, de hacer cosas que nos hagan felices.  

Leer y escuchar música también contribuyen a desconectar de la vorágine de todos los días. Lo importante es relajarse haciendo lo que a uno le gusta y como se sienta cómodo en algún momento del día. 

Fuente: Rosario3

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